Ideas de subtítulos
La meta no es tener una mejor vida, sino dejar que la perfecta vida de Cristo me domine
Mi antiguo yo ha sido crucificado con Cristo. Ya no vivo yo, sino que Cristo vive en mí. Así que vivo en este cuerpo terrenal confiando en el Hijo de Dios, quien me amó y se entregó a sí mismo por mí.